domingo, 9 de enero de 2011

"EL BADAJO PONE EL RITMO"

Imagen de internet
Con el titulo “El badajo pone el ritmo” el periódico Las provincias, en su difusión gratuita, en un articulo de María Gardo, nos cuenta el lenguaje oculto de las campanas. El campanario de la catedral de Valencia, el Micalet, tiene una altura de 51 metros, con 207 escalones para subir a su terraza y disfrutar según el día festivo de los diferentes conciertos que dan los Campaners. Son 11 campanas las que coronan el campanario, cinco grandes y seis pequeñas. La más joven es de 1735, según nos dice Francesc Llop, presidente de la asociación de campaners. La más antigua es la Caterina, del año 1305. El peso de las más grandes son de 1.750 y 1.765 kilos respectivamente.
Hacen falta cuatro expertos campaners para poder voltear una sola de estas campanas.
Los sonidos de las campanas son tan antiguos como la historia de nuestra civilización. Para muestra, un botón...

13 comentarios:

  1. que bien suenan las campanas del Micalet! y que bien se ve Valencia desde arriba! la verdad es que vale la pena subir para disfrutar de las vistas! Besos!

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  2. Hola Julia… gracias por tu colaboración,
    las campanas tienen voz propia, yo creo que son las sustitutas de los viejos tantanes de la selva y sí, Valencia desde las alturas del Micalet se ve preciosa, un beso

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  3. Para la, La Cueva Bohemia… como podrás ver tu comentario a sido eliminado, ya dije en cierta ocasión que los anónimos y poco inteligibles no son de mi agrado, y como no entiendo tu discurso azaharico te pido te abstengas en lo sucesivo de tus comentarios, no soy ninguna quinceañera

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  4. Hola cariño. Que raro me parece que le digas en ese comentario a mi amigo la Cueva que se abstenga de dejarte comentarios. Me parece tan raro que no me lo creo. Es un caballero siempre, jamás ha dejado un comentario anónimo y mucho menos ha faltado al respeto a ninguna mujer. Supongo y así lo creo que ha sido una equivocación. Un beso preciosa.

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  5. Hola Ana…su comentario no ha sido ofensivo, algo extraño sí, he intentado en los dos comentarios que me ha dejado en mi blog entrar en el suyo para poder entenderlo y no he podido y me he sentido dolida, no dudo de su caballerosidad y entiendo que siendo tu amigo te sientas mal, quizás si lee esto quiera explicarse si tengo que pedir disculpas las pediré. un fuerte abrazo

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  6. Estos malentendidos o no, son los que entre otras cosas me están convenciendo para quitar los comentarios de los visitantes. Al final. he decidido quedarme con los que mas o menos ya tengo una relación de intercambio. A parte de los mal entendidos, esta lo del tiempo para contestar todos con dedicación, con cariño. No me gusta contestar ni atesorar a mil seguidores, no dispongo de tiempo físico, y eso que ahora tengo muchas horas libres, pero cuando tenga menos, ¿que haré?.
    De todas las formas yo mismo tengo que confesar que muchas veces la he "cagado" con palabras que para mi tenían un significado, y para la persona a quien iban dirigidas, tenían otro. Eso, si habido un mal entendido, si no, estas en todo tu derecho a no admitir a quien sea, tu y todos.
    Bueno, que esto no es gran hermano...
    Sobre el articulo, —Que es lo que nos interesa— los sonidos, y mas los de los metales entre ellos las campanas, en Oriente están siempre ligado a los Dioses, a lo celestial.
    Incluso, algunos sonidos de la voz (Es un arte sagrado) son un vinculo directo a uno mismo a nuestro interior, que es el sitio mas cercano en que uno puede establecer contacto con lo divino.
    Un besazo y espero que te pongas bien enseguida para tomarnos ese café.

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  7. Hola Antonia:
    Las campanas para mí tienen mucha magia. Me encanta oirlas y me causa mucha tristeza cuando veo que muchas iglesias están sustituyendo el tañido de las campanas por grabaciones.
    Mi abuela, y supongo que todas las de las personas de nuestro alrededor, conocía perfectamente el lenguaje de las campanas y sabía, por ejemplo, por su manera de tocar, cuando el toque era de duelo, si el difunto era un hombre o una mujer...
    qué pena que estos saberes se pierdan.
    Un beso
    Cris

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  8. Dani estoy por darte la razón… y sí, con los sonidos de las campanas debian llama a los dioses. ¿Te imaginas? Lo cierto es que la mayoría de nuestras costumbres son ancestrales, un saludo SEÑOR.


    Hola Cris…la sabiduría popular se pierde, tanto modernismo esta empezando a pasarnos factura.

    ¿Cómo esta Italia? Seguro que preciosa como siempre

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  9. Las campanas nos acompañan de tiempo inmemorial y saben de nuestra historia.
    Un beso

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  10. Carlos y que historias, através de sus sonidos hemos llorado y reído, un abrazo

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  11. Hola , he pasado por aquí para agradecer el tintineo de las campanas y tu comentario en mi blog "desde mi propio escenario".
    Un afectuoso saludo
    Virginia

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  12. Me ha encantado el sonido de las campanas del Micalet...no he subido todavía y la verdad es que me he perdido muchas cosas en esta vida...igual es tiempo de hacerlas...un abrazo muy fuerte guapa...

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